martes, 23 de septiembre de 2008

Cambios de paradigmas



El concepto de integridad se va desarrollando cada vez más, va llegando, cada día, a los oídos de más personas en ésta época, en la cual, su carácter predominante es la de estar inmersos en lo que llamamos cambio de paradigmas.


Llamamos “paradigma” a las respuestas más o menos colectivas que tenemos acerca de: ¿qué es el mundo?, ¿qué es el ser humano? Y ¿qué significado tiene, entonces, que el ser humano se esté desarrollando, viviendo y evolucionando en éste mundo?. Y, claro, cómo hacerlo de la forma más adecuada posible.Por supuesto, hay muchos paradigmas “en danza”, estableciendo un sentido y marcos de referencia para nosotros, las personas. Según la cultura (y sus supuestos ideológicos), los conocimientos adquiridos por la misma, la técnica y la tecnología aplicada por cada una de ellas, las formas de relajarse o de distraerse, las formas de producir y de consumir, etc.. Éstos aspectos de la vida hacen que haya, incluso dentro de cada uno de nosotros, muchos paradigmas superpuestos.


Por ejemplo: Para el que se declara “cristiano”, existen una serie de acciones recomendadas como mejores que otras, esto es, existe una escala de valores, a la cual denominaremos: “ética cristiana”. Asimismo, el “cristiano” en cuestión puede vivir “dentro” de otro paradigma a atender, por ejemplo un modelo de “mercado” (o intercambio de bienes y servicios) donde prima otra escala de valores, es decir , otra ética. Podríamos incluir en ésta descripción, el paradigma en relación a las experiencias de encuentro amoroso o de vida en pareja, y así, en cada situación o contexto de vida: el campo laboral, el educativo, el de la salud, el político, el legal, etc.Hoy vivimos, desde hace unos años, una época marcada por lo que podemos llamar una superposición de paradigmas, o colisión de paradigmas, o lucha de paradigmas o más común un cambio de paradigmas ( a partir de mayor comunicación entre distintas culturas; de nuevos descubrimientos científicos, de nueva tecnología, de nuevas formas de comunicarnos van surgiendo nuevas formas de entendernos a nosotros mismos, al mundo y al significado que subyace a.....¿qué hacemos aquí, dónde y cómo gasto mi energía?En un sentido es una época de confusión, de incertidumbre, en donde los paradigmas que nos “ordenaban” ( lo que se ha denominado la “Caída de los Grandes Relatos de la Modernidad”) están empezando a perder credibilidad y legitimidad. Hay creencias que ya no se pueden sostener sin caer en una torpe falsedad o en una temerosa mentira.


Por ejemplo: El “mito del crecimiento ilimitado”, la creencia en que es posible un desarrollo socio-económico para cada vez más personas a partir de las riquezas naturales y la apropiada tecnología aplicada. Ya, suficientemente, los informes ecológicos, los problemas sociales generados por la desocupación o explotación y los datos de desastres ambientales ( debido al indiscriminado uso de los recursos naturales y los desechos tóxicos) son inevitables de reconocer y menos de justificar por el crecimiento económico de unos pocos. Dentro de esta línea de pensamiento se enmarca el “mito del desarrollo personal” ( en el plano psicológico y socio-económico), y digo mito (cuento inspirador, pero irreal), ya que está basado en una idea del “yo” como algo aislado y separado del “tú”. ¿Es posible ésto, en la sociedad plenamente interrelacionada que vivimos? ¿es posible desarrollarnos sin estar interesados en el desarrollo de los vínculos que nos animan, sin pensar en el desarrollo de aquellos que comprarán el producto que brindamos, sin estar atentos a las necesidades y responsabilidades de unos con otros?.


Podemos encerrarnos en racionalizaciones, podemos tener deseos de creer en utopías, podemos motivarnos con “mensajes canalizados” desde otras dimensiones, podemos encerrarnos en casas bien protegidas, en barrios cerrados, o en castillos de oro o de hielo, pero considero que el mito del “desarrollo personal” ya no nos ofrece lo que, sí, en otra época necesitábamos, esto es, un afianzamiento de la confianza en nosotros mismos, un animarnos a ser auténticos y a expresar nuestro deseo.


Hoy, percibo la necesidad de creer en mi, como también en reconocer la necesidad de que crean en mi y a su vez, la necesidad de creer en el otro. Hoy creo necesario que practiquemos el confiar unos en otros para, de alguna manera empezar a construir maneras reales de la posibilidad de creer en el desarrollo de todos (sin necesidad de embaucarnos unos a otros), cada uno en su tiempo y espacio, según sus derechos, capacidades, virtudes y responsabilidades.


Sintetizando algunas ideas:


-Vivimos una época de grandes cambios de paradigma


-Hay distintos ámbitos en los cuales estos cambios se manifiestan (político, económico, productivo-laboral, religioso, científico, ambiental, social, familiar, vincular, afectivo, sexual, psíquico, etc.)



-Hay dos movimientos específicos: 1)lo que está decayendo y 2)lo que está emergiendo.



-Hay también, dos fuerzas que resisten el cambio:


1. La que busca mantener lo establecido, tratando de conservar las formas culturales e institucionales y sus significaciones (esta se resiste al cambio)


2. La que busca acelerar la emergencia de lo nuevo, resistiendo y rechazando el natural desenvolvimiento de las cosas (ésta quiere forzar el cambio, de manera que fortalece, a su vez, la resistencia anterior)



Ambas quieren ganar, y cada ser humano juega según su puesto, sus creencias, sus motivaciones y sus reglas. Todos queremos ganar el juego.



Pero, ¿Cuál es el “Patrón de autoridad” que dará validez a las contiendas? ¿Cuáles son las reglas? ¿Quién es el árbitro?


Propongo, como hipótesis, que en ésta época de cambio, los patrones de autoridad, los árbitros que ponen orden y dirigen el juego son:


1. El Tiempo (todos los días sale el Sol para todos)


2. La intimidad con nuestra mismidad (la fe en la vida que late en cada uno de nosotros)


3. Las capacidades integradoras de cada uno, que ayuden a moderar los extremismos que tienden a querer imperar unos sobre otros
4. En definitiva las intencionalidades de cada uno de nosotros.



- “Che, Javier, pero quién trae la pelota para jugar”


- “Ah, no sé, yo traje estas palabras”



hasta el próximo encuentro



Javier Ignacio Alvarez


javignacio1961@yahoo.com.ar

lunes, 22 de septiembre de 2008

Videos sobre la economía mundial



Este post es sumamente aburrido. Es para aquellos, que, cómo yo, han tenido, en algún momento, inquietud por reconocer algunos cuestionamientos económicos.

Es sólo direccionamientos hacia videos que me han resultado útiles a la hora de tener más elementos de reflexión sobre temas económicos.

Vivimos tiempos de crisis del “mismísimo sistema económico”, en el cual se sostiene gran parte del orden que cada uno tiene de su vida.

La vida es un juego, dicen muchas personas, y yo también lo creo así, siguiendo algunas ideas de “Lila” ( la vida como un juego, según parte de la filosofía hindú ).

El tema – problema- es cuando el juego deja de tener reglas que igualen las posibilidades de los competidores. Es, por ejemplo, como si se estuviera jugando (divirtiéndose personas) un partido de tenis, y de repente uno de jugadores tomara la pelota con la mano y la hiciera picar en el campo de otro….el otro podría decir …” no, eso no vale” Y el transgresor dijera “ sí , sí, desde ahora sí ….¿porque? …porque las pelotitas son mías?.
Así son las reglas de la economía mundial, las implementa el que fabrica el dinero y no son tenidas en cuenta las opiniones de los demás que, también están jugando.

Como dijera Ralph Rothschild (googlear) “Denme el control del dinero y ya no importará quién haga las leyes”.

Ahí van los enlaces, para cuando estén con tiempo de jugar a reflexionar un poco.

1) El dinero es deuda:
“El dinero es deuda” es un documental didáctico donde se explica cómo se crea y funciona el dinero, una vez visionado, uno ya puede hacerse una idea de cómo funciona nuestro agradable mundo financiero y social. Es espeluznante entre otras frases que mencionan en el documental la del banquero Meyer Rothschild, fundador de la dinastía Rothschlid: "Denme el control del dinero y ya no importará quién haga las leyes."«

http://video.google.es/videoplay?docid=-2882126416932219790

2) Zeitgeist ( 2 Parte )
Zeitgeist es un documental sin ánimo de lucro del año 2007 producido por Peter Joseph con difusión por Internet (mediante Google Video). Aunque fue grabado originalmente en inglés, es posible encontrarlo con subtítulos en español. Es un documental a manera de intrahistoria: intenta partir de un análisis racionalista e histórico de la estrategia y cálculo político, de varias creencias religiosas e instituciones políticas y económicas, en especial el cristianismo, los ataques del 11 de septiembre, la guerra contra el terrorismo, la Reserva Federal y el sistema financiero internacional. El propio título, Zeitgeist, quiere decir "espíritu guardián del siglo", es decir, la experiencia del clima cultural dominante.

http://video.google.es/videoplay?docid=2141569373929310139&hl=es


3) Y, por último, un enlace para leer, relativamente corto, si quieren me piden desarrollos más amplios..ja,ja

http://www.altruists.org/f683

Salud, dinero y amor para todos …y en ese orden

Javier Ignacio Alvarez






sábado, 20 de septiembre de 2008

Individuo y comunidad



Creo que el ser humano ha ido logrando, cada uno, como individuo, desarrollos respecto a la importancia de su mismidad. Individuación que existía, muchas veces precariamente, muchas veces precedida de algún tipo de obligación para con otro, una especie de apéndice de otro ser u otra autoridad que le diera validación: sea ésta la madre y el padre cuando se es niño ( y no tanto); las autoridades de la escuela, el gobernante de turno; el capitalista de la comarca, del barrio o de la ciudad; el jefe poderoso o el intermediario divino – sacerdote- o traductor de enseñanzas religiosas.

El individuo se fue “liberando” de los mandatos ( materiales o espirituales ) que otro le imponía por la fuerza o con una sonrisa engañosa llena de bondad manipuladora, o con la mejor intención de ayudarlo, pero manteniendo su dependencia.

El tema es que a medida que ha crecido la independencia y la autonomía respecto del otro, también ha crecido la desafiliación; la falta de resonancia comunitaria, la celebración de estar en comunión, juntos, en torno a un mismo fuego.

Las nuevas independencias, el logro de derechos individuales han ido llegando de la mano del individualismo, la enajenación; la necesidad de mayor competencia y autoexigencia y la soledad o sensación de desamparo o desconfianza más notable.

Vivimos épocas en que algunos compromisos nos “suenan” a esclavitud, en que muchos acuerdos nos parecen limitadores de nuestra individualidad, en que toda ley
-necesariamente igualitaria- nos inquieta como violadora de nuestras libertades y derechos.

(Un poco de humor) …quizá encontrarnos con otra persona y decidir ir al cine nos lleva a pensar que quizá vamos a ver lo que no queremos, o quizá sea mejor, que cada uno vaya al cine por su lado y después encontrarse para despedirse ……si hasta quizá nos encontramos en el mismo cine y sentados junto al otro y pensamos que el otro nos sigue para sacarnos algo….tal el grado de, en nombre de la libertad, es que vivimos con un sesgo de paranoia y desconfianza del otro , como también de uno mismo.


Creo que hemos “cambiado” la tiranía de emperadores y las engañosas promesas de consejos oraculares por la tiranía de nuestro ego, que, en su afán de ser autónomo y con engañosas promesas de autoidealizaciones, se suscribe, ahora sí, en forma libre, a desiciones bien pensadas por los creadores del marketing contemporáneo.


La “guerra” entre el Bien y el Mal o entre la Sabiduría y la Ignorancia se ha instalado en nuestro interior y éste es el gran paso que ha dado gran parte de la Humanidad.

Un tema es:
¿existe la posibilidad de que los seres humanos se reencuentren comunitariamente para luchar contra la Tiranía y la Ignorancia que reside, ahora, concientemente dentro de sí mismos a medida de que pierden fuerza las Tiranías e Ignorancias del Otro, de los Otros?
¿Podremos crear una ética que nos una , más que una que nos someta al autor de la misma , o sea posea el copyright? ( de hecho… que hay una ley que rige en muchas circunstancias que dice, por ejemplo, “el cliente siempre tiene la razón”. Ésta “ética” ha inundado hasta a los consultorios psicoterapéuticos con la consecuente contradicción). Yo en mi necesidad de expresarme suelo recordar que el cliente tiene el dinero pero no tiene por que tener la razón ….¿o es que saber y poder son lo mismo?...para debatir.

¿Podremos renovarnos en el arte de recrear una ética que pueda respetar tanto las individualidades como las necesidades comunes?

Me gusta pensar en ella con el término de Interética, donde pueda hallar eco tanto la intención de más clara percepción de nosotros mismos cómo la mejor intención de reconocer al otro en su búsqueda de intención de reconocerse a sí mismo junto con la intención de reconocernos a nosotros que estaremos tratando de reconocernos mientras tratamos de reconocer al otro que a su vez está tratando de reconocerse mientras busca encontrarse con nosotros … ¿me entiendo?

Individuo y comunidad……lo privado y lo público……..el yo y el nosotros…….la personalidad y la transpersonalidad.

Creo que hay una comunidad, un espacio público, un nosotros y una impersonalidad “Pre-individuación” al decir de Ken Wilber ( y tantos otros) que tiene las características de impersonalidad, conformismo, obediencia jerárquica, conservación del orden establecido , y otros vicios del imperialismo material, moral o espiritual.

Creo que es necesario avanzar en el terreno de lo personal y desarrollar un ego fuerte, autónomo y sano….la pregunta es ¿hasta cuando? que la vida es corta…o ¿hasta donde? Sin reconocer a los otros…

Y también creo que hay una Comunidad, un espacio público común, un nosotros y una impersonalidad que es “Trans-individuación” y quizá ya van sonando las campanas, avisando sobre su hora, hora que empecemos a buscarla…..y digo empecemos ( en tren de buscarla planetariamente y no en pequeños guetos) porque este espacio no se puede buscarse en soledad. Como sí se puede buscar la individuación, la privacidad, la dignidad egoica o la personalidad autónoma.

Seguimos dialogando

Javier Ignacio Alvarez